sábado, 9 de diciembre de 2017

Operación Cama

Hemos empezado la operación cama. Hemos preparado a M su cama, a la altura casi del suelo, con un bonito cabecero hecho por su padre y pintado por los dos. Y hoy M se ha dormido en su cama. 
Ha sido El Segundo día, (con mayúsculas, sí), pero el primero fue hace una semana. Hubo poco éxito; se durmió, se despertó, lloró, y a la una ya estaba en mi cama. Y a partir de ahí, la semana no mejoró, M cayó con gripe, principio de bronquiolitis, toses, otitis.... así que con el calor de mamá a dormir toda la semana. Hoy no ha tenido fiebre, ha comido algo más, y a la hora de dormir, que estaba con su padre leyendo cuentos, ha decidido quedarse en su cama. Eso sí, me ha venido a buscar para que me acueste con él. 
Le ha costado más que habitualmente dormirse, porque la cama está pegada a la pared, y se ha dedicado a dar vueltas como una peonza, poniendo los pies en la pared, en el cabecero, en mi cara.... y al final, con la mano en mi pecho, se ha dormido. A ver como evoluciona la operación cama. 
Pero lo que sí que tengo claro es que no le quiero obligar, no quiero que lo pase mal, quiero que todo llegue de manera natural, no sé si será el camino correcto o no, pero por ahora es lo que intentaremos. 
La cama de M

martes, 21 de noviembre de 2017

Aprendizaje

Un niño de dos años y pico es agotador. Y si empieza a decidir él lo que quiere ponerse, los zapatos, la ropa, que se enfada cuando le quieres vestir, cuando le quieres desvestir, cuando es la hora del baño, cuando hay que salir de la bañera...... pues al final, no sabes ya ni qué camino es el correcto. Así que así estamos ahora, M midiendo los límites y nosotros intentando educarle. Hoy en la escuela nos han dicho que en la hora de la comida, ha empezado a dar tortazos a su compañera de al lado. Y que se ha tomado la regañina mal, y no ha querido comer. Rabietas a todas horas. Y hasta la abuela, que ayer se tuvo que quedar un rato con él nos comentó que M es un tozudo, no quiere algo, y se pone bruto. Y al final te das cuenta que el bebé ya no está y que hay una persona ahí dentro, que intenta expresarse. Y que se toma muy a mal que le contradigan. Y los padres estamos en proceso de aprendizaje de como manejar todas estas situaciones nuevas.
 Hace un par de meses, era más fácil, porque su forma de expresarse era llevarse cosas a la escuela, aunque fueran peregrinas, desde unos guantes de cocina, pasando por una naranja o un tubo encontrado en casa del abuelo.



Muestrario de lo que a M le gusta llevarse a la escuela.

Ahora se emperra en una idea, y la lleva hasta el extremo. El padre me decía que era un buen actor, porque ponía cara de pena y de llorar,  y acto seguido eran las risas. 

Pues en eso estamos, dos años y pico de M, y nosotros en periodo de aprendizaje. 



viernes, 29 de septiembre de 2017

Evolucion

Las cosas van muy rápido. La evolución del pequeño M es alucinante. De repente en su cumpleaños, saca el orinal, y hace pis delante de todo el mundo, porque quiere enseñar sus avances; otro día, en casa de los abuelos, hace guardar la aspiradora a la abuela en su caja, o me hace subir la caja del ventilador del sótano, y guarda el ventilador. Los dos aparatos no le gustan y le dan miedo. 
También ha perdido un zapato, se enfada, no se los quiere poner y los tira. Después de mirar en toda la casa ya pienso que M lo ha tirado a la basura. 

Y el lenguaje. Siempre he defendido que hay que dejar a los niños evolucionar a su ritmo, no presionar para que aprendan. Aunque los abuelos, o el resto de madres/padres que te encuentras, lo primero que hacen es hablar y opinar. La gente pregunta "cuantos años tiene?", y después de escuchar la respuesta, dicen "aaaahhhh". Que me dan ganas de preguntar yo a mi, "por favor, desarrolla un poco más, porque mi cansancio integral no me permite discernir lo que quieres decir".
Pues M ha pasado en tres meses de tener un vocabulario limitado , en el que sus palabras preferidas eran "mama", "papá", "agua", "avión" (no se perdía uno que pasara encima de nuestras cabezas), "aúpa", "caca",  "más" o "aquí" , y con esas palabras sobrevivía. Bueno, y con el "no", porque obviamente todo es "NOOOOOO", el "sí" no entra en su vocabulario; y de repente le escuchas, y ves que te dice palabras nuevas, que su repertorio se ha incrementado, aunque a veces no sepa yo discernir lo que me quiere decir. "Calle" y "cable" se me parecen demasiado, y tengo que tirar de contexto. Aunque hay veces que no me sirve de mucho. O hoy en e coche de camino a la escuela, que me decía algo parecido a "Vaya", y yo decía combinaciones posibles a ver si acertaba, M volvía a intentarlo, y ha sido fracaso total, no he llegado a adivinar lo que me quería decir. Pero es flipante lo que es capaz de evolucionar en tan poco tiempo!!.
SE BUSCA ZAPATO


lunes, 28 de agosto de 2017

Respeto por los tiempos

Respeto por los tiempos de los niños. Que a veces es muy complicado, o  porque los padres tenemos prisa, o porque el entorno presiona. M siempre ha dormido mal. No ha tenido nunca ningún problema en dormirse, se dormía enseguida, en brazos, en porteo, en la teta…. Pero luego, cada 40-45 minutos se despertaba, en cada ciclo de sueño. Si había suerte duraba un hora y media. Y luego se volvía a dormir de nuevo enseguida, en la teta. El sueño mejoró poco a poco, y por el año y medio ya pude dormir un poco más,  de los 20 despertares iniciales, bajamos a 12, y luego a 4, y luego a dos. Pero durante estos dos años, menos en contadas ocasiones, M siempre se ha dormido conmigo. Cuando era más pequeño, el padre de M le lograba dormir de vez en cuando en el porteo, pero luego a M le gustaba estar en la cama, posición horizontal, y pegado a mí. Así que si el padre le tenía que dormir (me corté un dedo y tuve que ir a urgencias, decidí salir con las amigas…), se podía tirar 2 horas llorando y luego ya caía rendido del cansancio.
Y justo en estas vacaciones, M pasó de tener una mamitis increíble, a hacer un poco más de caso al padre. A poder estar jugando con él sin reclamar mi presencia, a ir a por él para jugar o para salir a la calle….. y es que antes, la verdad que  no le hacía mucho caso, y si era para dormir, no le quería ni en pintura.
Así que desde las vacaciones de Agosto, lo que hicimos, es que nos metíamos los tres en la cama, y aunque al principio, M que es muy listo, se cambiaba de lado para estar solo conmigo, luego empezó a aceptar mejor que el padre estuviera también presente. Y le empezó a tomar el gusto a ponerse encima del pecho del padre para dormir.
Y hace tres días, hemos pasado a que el padre ya duerma a M solo. Se van los dos a la cama, y M ya se duerme. Sin llorar, sin dramas, sin teta, y tranquilo. Así, que sí, al final es saber  respetar los tiempos de los niños.

Ahora el siguiente paso será que M quiera dormir en su habitación. Pero poco a poco. 

Siesta en el pueblo, que mola mucho.

miércoles, 16 de agosto de 2017

Vacaciones y cambios

Ya de vuelta de vacaciones, que no han sido como en un principio esperábamos.

Nuestras vacaciones iban a ser en Mallorca, pero los acontecimientos (M estuvo ingresado 4 días) hicieron que tuviéramos que cambiar de planes, así que cancelamos el viaje, M no ha viajado en avión, y nosotros no hemos tenido que pensar en mucha logística. A cambio, hemos ajustado planes y nos hemos ido a La Manga, donde los abuelos tienen una casa, plan conocido y trillado.
Para la maleta, hemos metido los imprescindibles de M:
- libros: "La oruga glotona", "Pájaro amarillo", "Monstruo rosa", "Puedo mirar tu pañal?", y "Un beso antes de dormir".
- peluches- pájaro, gato, vaca
- el triciclo - M no va a ningún lado sin él

Y hemos pasado una semana, con mucho calor (sí, había de nuevo otra ola de calor) pero M disfrutando como un loco con el mar.

Aquí tengo que puntualizar, que M no es un niño que se quede quieto con la arena, se pone a correr, se mete en el mar, sale, hace la lombriz arrastrándose por la arena, viene una ola y le da un revolcón, el padre entra en pánico, ve un inflable de otro niño y va corriendo a montarse, pisa la toalla de un bañista y el bañista se pone histérico, el padre pide perdón pero se pone también nervioso. Yo que me había sentado en la toalla tengo que ir corriendo a hacer no sé qué. Nos ponemos con M a saltar olas, M hace la croqueta en la arena.... y vuelta a empezar. Vamos, que descansado no es. Divertido sí.
Con el triciclo M se tira como loco por las rampas, dice "hola" a niñas, quiere abrir las duchas del paseo marítimo, persigue a perritos... y los padres corriendo.
Cuando llega la noche, tenemos una hora de descanso antes de ir a la cama y empezar de nuevo.

Y así hemos estado, disfrutando como locos, hasta hoy, que hay que volver a la realidad, snif snif.

miércoles, 26 de julio de 2017

Sustos y hospitales

lunes, 3 de julio de 2017

Destete

23 meses. 23 meses de lactancia. Si me lo dicen en el día 2 no me lo creo. Que M no se enganchaba, que era casi imposible pensar que iba a mamar, que le dabamos suplemento de leche porque no mamaba. Recuerdo esa noche en el hospital, totalmente abatida porque era incapaz, y el padre de M intentándome consolar. La enfermera de la planta intentando ayudarme, poniéndome a M en diferentes posiciones a ver si se enganchaba. Y saliendo el tercer día habiendo conseguido que M se cogiera a un pecho. Compré pezoneras que no usé, porque todavía era peor, y con esa incertidumbre nos fuimos a casa.
Y en casa lo seguíamos intentando, M y yo, y la verdad que tengo que dar todo el mérito a M, porque llegó un momento en que se enganchó bien, y mamaba. Y se dormía. Y perdía peso, y seguíamos con el suplemento. Y justo cuando cumplió un mes, se me cruzaron los cables, y dije “sin suplemento, porque tengo los pechos que van a estallar y este niño tiene que vaciar algo esto”.
Y sería porque era el momento justo, porque M tenía ya más peso y más fuerza pero la cosa funcionó, y M empezó a coger peso. Y tenía yo tan poca fe que todo fuera a continuar tan bien, que solo me compré un sujetador de lactancia, y no tengo nada de ropa de lactancia. Pero la cosa siguió funcionando, y funcionando, y cumplimos un año. Y ha sido duro, porque M se despertaba de 10 a 12 veces por la noche, (y estoy hablando ya con más de un año), pero mamaba y se dormía, y yo me volvía a dormir también. Pero es cansado.
Y cumplimos un año y medio. Y en Diciembre, pensaba que ya no podía más, y que había que destetar pero también superamos el bache, al igual que otros mucho baches, de dormir mal, de cansancio, ojeras…pero también estaba la felicidad de M, la mía por compartir esos momentos, y hemos llegado a los 23 meses.
Justo ahora no ha sido planeado, pero como M se puso malo, con 39 de fiebre, (y hacía 39 grados en la calle también), M estaba sediendo, y al final le dabamos agua, y por la noche cuando se despertaba, también le dábamos agua. Y llegaba la tarde, y después de la noche tan cansada, había días que M quería teta, y los dos nos sentábamos tranquilos, pero había otros días que le decía que “la teta está dormida” y así , poco a poco, sin pensarlo, sin estress, de repente me encuentro que en un día, M ha cogido la teta un poco para dormirse y ya está. Y ya no me ha pedido más, en todo el día.
Asi que, 23 meses de lactancia,que han sido maravillosos y un regalo, y que con melancolía, se están acabando. Pero que me han encantado.
y tan felices en la playa.


martes, 27 de junio de 2017

El tiempo pasa

Hemos empezado el verano. Oficialmente. Y podría seguir hablando de M enfermo ¡con 39ºC en la calle!, con una perforación de oído, y con dolor (bueno, ahora que se le ha perforado, ya no le duele), y de mi sueño perpetuo. Pero como tiene toda la pinta de que esto va a durar hasta el infinito y más allá, voy a recordar lo rápido que pasa el tiempo.
El fin de semana estuve colocando ropa de cuando M era bebe, y claro, no me doy cuenta, pero era minúsculaaaaa. Que M pesó 2600gr y midió 47 cm, y es verdad que todo lo que le poníamos le estaba gigante. Y de repente han pasado casi dos años y poco a poco van cambiando las cosas. La ropa se hace pequeña, incluso en la que flotaba dentro de ella, y M se hace mayor. Y los cambios son pequeños y paulatinos, aunque si te paras, te das cuenta de todo lo que ha cambiado la vida.

Ya no voy ni con carrito ni con porteo, que M obviamente anda (aunque estaría mejor decir que corre), pero meto en el maletero del coche el triciclo. Que no me puedo despistar, porque si le dejo en el punto A, y sigo el vuelo de  una mosca, en 5 segundos ha pasado al punto B, C y D y está teniendo alguna idea feliz.  Que llevo gusanitos en el coche, porque si se convierte en Chuky y no quiere montar, le soborno. Sí, le soborno, porque estoy cansada y con sueño y mis sinapsis neuronales no dan para mucho más. Y mi coche está hecho un desastre, entre los restos de comida, los juguetes, y el caos que llama al caos.

Que antes podías intuir que te entendía o te escuchaba, ahora sabes que te entiende, y no te hace ni caso. Vamos, que hace lo que a él le sale del moño. Que le gusta jugar y tomarnos el pelo. Y que se rie de las gansadas que le hacemos. Te das cuenta que se convierte en una personita, con todo lo que ello conlleva. Y es muy divertido, la verdad- aunque hay cosas, está claro, que piensas “de donde habrá sacado esta idea?”, por ejemplo,  cuando no quiere más comida, se la saca de la boca y la esconde detrás de radiadores….como siga teniendo ideas así, no se cómo acabaremos en mi casa, pero supongo que parecido a mi coche.


Y que M me sabe buscar las llaves del coche cuando no las encuentro! Esto si es que es un avance.


Anda que no hemos avanzado desde aquí!

viernes, 16 de junio de 2017

Desorden

Mi casa es un desastre. Literalmente. M sigue malo con la garganta,  y quiere estar todo el rato pegado a mi. También literalmente. A parte que tiene fiebre y está mimoso, pero vamos, nos damos un calor que "pa qué".
Pues en los momentos en que no tiene tanta fiebre y puedo hacer algo, como está conmigo, se dedica a sacar las sartenes de los cajones, a meter ropa en la lavadora, a quitar todas las tapas y partes del exprimidor... vamos, que parece que es Atila el que ha pasado por la cocina. Y cuando ya se duerme,  lo único que puedo hacer es sentarme en el sillón, y dejar todo a ver si hay duendes que vivan en mi casa y que les guste recogerlo.
Pero claro, ya no solo eso, voy dejando mi ropa tirada y sin organizar, zapatos por en medio...luego no encuentro nada, y el caos se multiplica.
Yo que pensaba que a estas alturas y con este calor todas las bacterias y virus habrían muerto y podríamos inaugurar la temporada de piscina alegremente.Y lo que vamos a hacer es estar alegremente en casa, intentando pasar este temporal.

Ni haciendome el Zombi M se despega de mi. Aunque despues de dos semanas con M malo, mi estado actual no se sabe si es vivo o muerto, he de decir.
 
Dibujo de Ali del Rey www.alidelrey.com


lunes, 29 de mayo de 2017

Frustración

Lunes de nuevo, y M llorando porque se ha despertado, y no me ha encontrado. Estaba con su padre de todas formas, pero si no me encuentra se pone a llorar desconsoladamente. Y yo he tenido que irme al trabajo. Con todo el sueño que tengo, el cansancio y la frustración de este fin de semana:
 Hubo un mosquito el sábado que no nos dejó dormir, y yo solo encendía la luz a ver si le veía y conseguía acabar con él. Lo conseguí, después que me picara dos veces y otra a M. El padre se libró.
Luego un calor horrible para ser Mayo. Así que en casa dejaba a M en body, pero el sábado como hacía tanto bochorno, le dejé solo con el pañal . ¿Que hizo él? Pues quitarse el pañal y hacer pis en la alfombra.
Hora del baño, M encantado con el agua y jugar con sus vasos tirando agua fuera. Te descuidas 2 segundos y en lugar de tirar el agua en la bañera, lo ha tirado todo en la alfombra del baño. Hay que sacarle y secarle, y como no quiere, hace la técnica de tirarse en el suelo. Se tira en el suelo si hay que meterle dentro del coche, si hay que ponerle ropa, si hay que secarle….

Pues al final del día, todas esas pequeñas y tontas cosas van aumentando frustración, que es por el cansancio acumulado, ya se. En condiciones normales no te afectarían, pero así estamos. Y para terminar el día, llega la cena, y M tampoco quiere cenar, porque no le gusta la cena o porque no tiene hambre, pero ya mi cabeza no da para más, para tener paciencia o para dejarme fluir; así que me escondo dentro de mí en la habitación para coger un poco de aire y volver de nuevo al mundo. Y de repente es lunes de nuevo, y M llorando porque se ha despertado y no me ha encontrado. 



lunes, 8 de mayo de 2017

Tus amigos los mocos

Había un libro que me encantaba de pequeña, las Tribulaciones de un Chino en China. Al principio me costó cogerlo porque era el libro más gordo que me habían regalado, y luego ya no pude parar de leerlo. Pues este fin de semana me ha parecido algo igual.. Lleno de tribulaciones, que te vas metiendo, metiendo, metiendo, y llega un momento en que no sabes ni dónde estás.
 M se puso malo el viernes, con mocos, con lo que no puede respirar, y eso hace que se despierte cada 15 minutos. Que le tienes que quitar mocos, volver a dormir, que llore y se enfade por todas las cosas que le están pasando cuando él lo que quiere es seguir durmiendo. Y yo voy a cámara lenta luego durante el día, cansada, las pequeñas cosas hacen que uno se enfade y la cabeza no da para más… y lo que termina pasando al final de todo esto, es que me puse a hacer la comida, mientras leía el periódico, y pasó lo que pasó. Patatas quemadas y a volver a empezar.
Y luego M no se quiere dormir o comer, y está también irritable, y ya ni él mismo sabe lo que quiere, y está cansado, y nosotros también, así que la opción que nos queda es montarle en el coche para que se duerma.
Y así se va sobreviviendo a la temporada de mocos.
 Espero no caer mala yo también como el pequeño, y ser un virus andante. Feliz lunes!
www.Alidelrey.com

miércoles, 3 de mayo de 2017

Dormir, dormir, dormir

Dormir, dormir, dormir, solo puedo pensar en eso. Y acabamos de acabar un puente de 4 días.
M sigue durmiendo con nosotros, y por ahora no me planteo cambiarle de habitación, y sí, se sigue durmiendo a la teta; sí, sigo haciendo todo eso. La gente ya ha pasado de mirar con cara de "qué extraño", a "todavía?" y a opinar ya libremente en voz alta. Me encantan las opiniones de los demás, porque luego yo puedo mirarles a ellos con esa misma cara, y me sonrio, pensando o diciendoles "todavía tienes esas ideas?".
Bueno, total, que M lleva una semana en la guarde y allí duerme solo; misterios sin resolver, porque aquí en casa solo existe la teta. Que a veces tiene que dormir con los pies encima de mí y la mano en la teta, y es oler al padre y cambiarse de lado para estar solo conmigo.
Y no me lo planteo, aunque a veces mi espalda termine siendo un ocho, porque al final todo llega a su fin. Se termina, pasan las malas rachas y también los momentos preciosos y únicos. Y quiero disfrutarlo todo, lo bueno, lo malo, lo regular. La maternidad como mi interior me dice.  Y eso que a veces pienso si lo estaré haciendo bien o no. Si el dormir, la comida, el jugar, el estar con él, enseñarle cosas, hacer que aprenda, como lo hago, está bien o mal. No sé si algún día lo sabré, si luego veré los errores mirando atrás, pero está es la forma en la que me siento cómoda. Criando a M con apego, poniéndome en su piel, o intentándolo, y empezando a crear ahora unas bases, para que le sirvan el resto de sus días. Y me encanta, con el cansancio incluido, los bostezos y todo. Porque luego voy conduciendo al trabajo, y sonriendo pensando en lo que ha hecho M el día anterior, lo que se ha reido y lo que ha disfrutado.

 

M durmiendo con su padre!!!!

lunes, 17 de abril de 2017

Por las primeras veces

Llevamos unas semanas que estamos llenos de primeras veces, algunas que molan muchísisisimo, otras que dan un poco de penita por todo lo que conllevan.
Hemos ido a la playa esta Semana Santa. Y M en la playa es feliz. Se juntan las dos cosas que más le pueden gustar, arena y agua. Así que con su regadera, cogiendo agua, echándola en la arena, o echándosela encima, o haciendo la croqueta en la playa, metiendo los pies en el agua.... era el niño más contento del universo. Era bajar al portal de la casa, y ya pegar gritos de alegría. Que si le dejas, se mete con todo lo puesto en el agua y sin problemas. Y si se cansaba del agua se ponía a correr por la arena y luego se dejaba caer. Sí, así de bruto. Menos mal que era arena y no asfalto. Esperemos que no lo quiera repetir ahora que hemos vuelto a la dura realidad.
Ya por hablar de primeras veces, ha sido también la primera vez del padre de M con la cocina de gas. Encenderla, coger una cerilla, acercarla y prender fuego.... no se si en las cavernas se hubiera extinguido, porque cuando fui a ver que tal iba, había dos mandos abiertos, y solo un fuego con llama, y  del otro saliendo gas. Así que relegaremos al padre de M a las cocinas con placa vitrocerámica.

Y hoy ha sido el primer día de M en la guardería. Estamos empezando el periodo de adaptación, así que hoy ha sido cortito, pero M se olía algo, porque para ser un niño que no quiere nada los brazos, no se despegaba de mí. Al final ha cogido confianza y ya se ha puesto a jugar. Y ha debido de ser intenso, porque en el coche de camino a casa se ha dormido.

Y otra primera vez, la más bonita y tierna, también ha pasado esta semana. Antes de dormir, le contamos cuentos. Hay uno que se llama Un beso antes de dormir, y cuando el padre le dijo a M, "da un beso a mamá", M se quita el chupete, acerca su cara a la mia, y como en cámara lenta, M me da un beso. No hay palabras. Así que vivan las primeras veces, que son tan bonitas.

 
Dibujo del libro "Un beso antes de dormir" que le encanta a M. 

viernes, 31 de marzo de 2017

Feliz Dia del Padre

Este mes está siendo una locura. Los últimos días / semanas (ya he perdido la cuenta ) M está durmiendo mal y voy como un zombi. Hoy M mientras dormía me ha dado un cabezazo en la boca y parezco un poco Kunta kinte, con el labio hinchado. Pero no quería que pasara el mes sin comentar que este mes ha sido el día del Padre. Y la verdad que  es emocionante celebrarlo y recordar.

M nació por cesárea,  así que mientras yo estaba en la REA, tuvieron que hacer piel con piel, el pequeño M y su feliz y agobiado papá. M era una cosita pequeñita y preciosa, pero como todos los bebés, hizo el meconio, y su padre le tuvo que limpiar. Pero no, se vió tan agobiado con ello que llamó a la enfermera. Que le dijo, “no, lo tienes que hacer tú”. Pero debió ver los pocos avances que estaba haciendo, que al final le limpió la enfermera. Me rio de pensarlo, porque tuvo que ser gracioso.
En esos primeros momentos, también le pasó que M se puso a llorar como un loco. Y M cuando llora se pone rojo, le salen ronchones, parece que tiene una reacción alérgica, de cómo se pone. Como no lo sabíamos, el padre se alarmó y volvió a llamar a la enfermera para que le vieran y le reconocieran. Estaba todo perfecto, menos una verrugilla que tenía en el pecho, que se terminó cayendo.

Asi que sí, M estuvo con su padre, ahí, durante sus primeras horas de vida. Y el padre mola mogollón, como M.

 
Dibujo de Ali del Rey www.alidelrey.com

domingo, 12 de marzo de 2017

Marzo

Se acerca la primavera y he hecho una camiseta a M. Quería que la hubiera estrenado el pasado fin de semana que celebrábamos mi cumpleaños, pero M se puso malo, así que se pospuso hasta el siguiente. 
Si hago un resumen hasta la fecha, M no se ha puesto muchas veces malo, pero es que es agotador. Y menos mal que medio cayó en el finde. Porque estar sin dormir, intentando que duerma M, bajándole la fiebre para que pusiera descansar.... pues que sí, que es muy cansado. 

Hemos mejorado también bastante en el dormir, M se despierta cada vez menos, y eso ayuda a que si cae malo y volvemos a no dormir, seamos medio personas para poder estar cuidándole de noche y no morir de día. Seguimos durmiendo los tres en la misma cama, y aunque el padre y yo de vez en cuando hablamos de cuando pasarle a su cama, lo vamos posponiendo. Porque si M se despierta,  pone los pies encima de mi, y sigue durmiendo. Mucho menos cansado para nosotros. 

Y en estas últimas semanas, M ha desarrollado una pasión increíble por los coches. Se para en todos los coches que hay aparcados de camino al parque, intenta abrirlos y  toca las ruedas, las luces,  y si le dejara , también el tubo de escape, acaba con las manos negras.  No hace nada de caso a los peluches que hemos comprado, pero se tiene que llevar el coche a la cama. Hasta ahora lo que más le gustaba era un pincel de cocina, y ahora lo ha cambiado por coches. La verdad que me encanta verle descubrir el mundo, a su manera, que está claro que no es la nuestra, ni la que nos habíamos imaginado.

Dibujo de Ali del Rey :www.alidelrey.com 

lunes, 27 de febrero de 2017

Tardes de piscina

A M le encanta jugar, y si es en el agua, pues todavía mejor. Es increíble el grito de felicidad cuando abro la puerta del vestidor y ve la piscina. Y no salta de alegría porque le llevo en brazos. 
Le encanta el agua, y se tira a la piscina en cuanto le dejo - la verdad que da un poco de cague porque no flota, se hunde, y da miedo pensar lo que pasaría si no hubiera un adulto -. 

Vamos a clase, y no sé si sería mejor no ir a clase y que hiciera lo que quisiera. Porque lo que M quiere hacer es jugar, no estar con el churro, las pesas o ponerse encima de un fantasma y mover las piernas para aprender a desplazarse. Lo que hay que trabajar para aprender a nadar... 
Lo mejor de todo es que el año pasado iba el padre, pero yo cambiaba a M y luego le recogía y le secaba. Este año voy yo sola, y el panorama es el siguiente: M, la bolsa de la piscina y mi bolso. Cambiarme yo, preparar a M, guardar todo en la taquilla, y salir al agua. Hasta ahí todo controlado . La vuelta es más complicada: quitar a M el pañal y el gorro, ducharle, ( yo con bañador mojado). Secarle, vestirle, y dejarle sentado para cambiarme yo. Todo esto mientras le entran las ganas terribles de tomar teta y quiere lanzarse sobre mi. Que hacer ejercicio abre el apetito.  Con todo lo cual siempre parezco una loca, porque en cuanto me pongo el pantalón ya lo tengo colgado de la teta. Y eso si todo sale bien. Un día me di cuenta que no llevaba pañales, y rebuscar en el cubo para encontrar el de M que había tirado antes no me parecía muy elegante, así que le puse otro de piscina y a casa corriendo. INFORMACION al consumidor: el pañal de piscina no sirve como pañal normal. El pantalón de M  y la silla del coche acabaron mojadas en pis. 

Todo esto me hace pensar que mi marido se lo sabe montar bien cuando dice que necesita mi ayuda para ir a la piscina, voy a dejar de ser superwoman. 




miércoles, 8 de febrero de 2017

Tiempo

Es curioso cómo un día eres una madre que puede con todo, todo va bien, no hay baches en el camino y  de repente, de la nada, todo se viene abajo, aparece de nuevo el cansancio, la poca paciencia, el agotamiento, y todo en el horizonte son problemas.

No creo que haya cambiado todo tanto en cuestión de minutos, pero al final del día de ayer, todo me sobrepasó. M que no quería cenar, y no sé si es que estaba cansado, o que los guisantes, la tortilla francesa y la manzana asada no le apetecían nada, pero llegó el colmo de mi frustración. Que al final todo es por el cansancio acumulado y él no dormir.

Habitualmente a M le duermo yo, pero ayer como ya no podía más, deje que su padre lo intentara, y fueron 15 minutos o más de llanto desconsolado, para que al final yo claudicara y relevara al padre. Mala jugada por cualquier lado porque con el sofoco tardó más en dormirse. En este caso no sirvió eso que te dicen que después de llorar se duermen y caen, no. Y luego tuve al padre diciendo que M manipula.

No creo que manipule. Creo que le gusta dormirse conmigo, tumbado en la cama, y danzando por encima de mí hasta que encuentra la postura y se duerme. Como no sabe decirlo con palabras, pues llora, es su forma de expresión, para protestar por el cambio de rutina.


Es complicado a veces el día a día, está vida moderna donde le madres trabajamos y no hay tiempo de nada, con lo que en lugar de tomarnos el tiempo que el bebé necesita, el tiempo que nosotras necesitamos, intentamos hacerlo todo a la carrera y ya. Y todo al final pasa factura. 

Porque quiero llegar a todo, y querer hacer todo con tiempo limitado es complicado. Intento también sacar tiempo por las noches para coser a M un libro de fieltro para que pueda tocar y estrujar y podamos jugar con él, y lo que tardaría una semana en hacerlo, se convierte en más de un mes.


Asi que intentaré aprender y  seguir intentando encontrar el equilibrio, haciendo malabarismos para no quitar tiempo para estar con M, dormirle siguiendo sus ritmos, y dejarle comer libremente. Al menos lo seguiré intentando. 

lunes, 6 de febrero de 2017

Risas

Felicidad es que M vea mi tripa y me haga pedorretas, y nos riamos los dos como locos.

Y de verdad que se te olvidan todas las penas. Vale que estoy todo el día con él, si no estoy trabajando claro, y ya he dicho que es muy cansado. Pero los momentos en que me rio y me lo paso tan bien, no los cambiaría por nada, y dejo de pensar en todas las absurdeces de la vida, para disfrutar del momento. Asi que cuando hecha polvo estaba tumbada en la cama dando el pecho a M, y me ha hecho pedorretas, se me ha quitado el cansancio de golpe,

Tengo que decir que M también ha descubierto los coches teledirigidos de sus primos, y al principio le daban miedo, se escapaba dando pasos hacia atrás, y luego ya de enfado, lo cogía y le daba la vuelta. Supongo que de repente ver un coche que se acerca a tí solo, por primera vez, debe ser desconcertante. Pero también ha sido un momento en que nos hemos echado unas risas.

Asi que para recordar, nos lo hemos pasado muy bien este fin de semana!

lunes, 30 de enero de 2017

Creciendo

La verdad que es increíble ver crecer a un niño. M le falta poco para el año y medio, y puede que haya niños que digan más palabras que él, o que hayan empezado a andar antes, o que sepan comer solos ya, pero hacer este viaje con él es maravilloso. Ver cómo aprende, cómo intenta hacer las cosas, como prueba y se enfada, cómo va evolucionando es un regalo. Mi madre me decía hoy que me tenía que haber cogido más tiempo de excedencia, y no puedo estar más de acuerdo. Es muy complicado conciliar trabajando, quitando ya todo lo que te pierdes; y porque la crianza es dura, es cansada, a veces es frustrante, unos días estas llenas de dudas, otros días contenta porque ha salido bien. Hay días en los que pienso destetar por las noches, hay otros días que me digo, un poco más ya que M es feliz. Pero el global es maravilloso, con todos los miedos, alegrías, frustraciones y dudas.

Esta semana ha nevado, y me hacía especial ilusión enseñarle a M la nieve. Y aunque he tenido que esperar a volver del trabajo, ha  sido un momento único. Porque M estaba eufórico pisando la nieve, volviendo a pisar para deshacerla, hacer un charco, y salpicar un poco.
Y es en estos días, cuando trabajar es complicado y se hace cuesta arriba, porque tengo que ir con prisas en un momento así porque es tarde, tengo que comer, luego se va el sol y haría más frío. Y me planteo si lo estoy haciendo bien, porque M está ahora aprendiendo un montón de cosas nuevas, a soplar por ejemplo, con lo que hace sonido con  la flauta, o burbujas en el agua con una pajita ( y le encanta, y se ríe, y lo vuelve a hacer). Y son cosas que me da pena perdérmelas. Porque son momentos únicos que no volverán a suceder.

La verdad que la niñez es un momento precioso, y me encanta poder participar, con M, porque como he dicho, es un verdadero regalo. 

lunes, 9 de enero de 2017

Recuerdos de los tres meses : caca

Cuando estaba escribiendo la anterior entrada, que M no comía, cruzaba los dedos para que fuera algo pasajero y eso me recordó que cuando M tenía tres meses, pasó de hacer caca cada día varias veces a hacerla una vez a la semana. Y dijimos "esto ha venido para quedarse". Y estábamos asustados, porque si nadie te dice nada, no  te parece normal que un bebe no haga caca todos los días.

¿Que pasaba? que el día menos pensado te encontrabas fuera de casa, en una conferencia de Carlos Gonzalez, montabas a M en el coche para ir a ver una amiga en su tienda Trizas y Trazos, porque se te habían olvidado los banderines del Día del Recuerdo, y M decidía que era su momento. Y menos mal que había cambiador, toallitas y agua corriente, porque eso fue un festival de caca.  M manchado hasta arriba, la ropa manchada entera, y yo sudando ríos de tinta para limpiar todo lo que había salido de ese cuerpecito tan pequeño.

Pues por lo visto eso de hacer caca una vez a la semana o incluso más, puede pasar si el bebe solo está a leche materna. Al final cuando le cogías el truco, era sencillo, los cambios de pañales sabías que  iban unicamente con  pis, y cuando se acercaba el sexto o el séptimo día,  ya ibas con muuuuucho cuidado a los sitios, Con recambios de todo, con millones de toallitas y cruzando los dedos porque no te pillara fuera de casa.

Al final, como todo, terminó esa época. Porque pasa eso, que se van terminando etapas casi sin darte cuenta. Y el bebé deja de ser bebé.


Dibujo  modificado del original de Ali del Rey WWW.alidelrey.com

sábado, 7 de enero de 2017

Este niño no come

Empezamos el nuevo año y M malo desde Nochevieja. Al final no salimos y la pasamos los tres en casa. M con fiebre, y nosotros aguantando hasta las 12. Y un horror de noche. Que ha seguido con un horror de semana. Como la fiebre le bajó al final no le llevamos al medico pero le debe doler la garganta porque no ha comido en toda la semana.

Y es de verdad muy frustrante. Que no lo sería tanto si yo fuera una persona que mantiene la calma, pero no sé yo si yo fui creada con mucha paciencia. El problema es que mi agobio viene porque cada vez que M no come pierde peso, y no está la verdad para perder mucho peso. Con lo que llega un momento en que todas las enseñanzas de como manejar la comida y los bebes las dejo a un lado, y le intento obligar a comer, y es un caos. M se pone a llorar, yo me enfado.....

Y eso que M llevaba unas semanas comiendo que no nos lo creíamos, comía que daba gusto. Y nosotros tan contentos. Es increíble como con las pequeñas cosas con M nos ponen contentos y también nos frustran tanto. Voy a cruzar los dedos a ver si esta fase de no comer es porque está malo y no es una de las cosas que vienen para quedarse.

 Al menos el día 5 pudimos ir a la Cabalgata, a ver a los Reyes. No es que M les hiciera mucho caso, pero ver las carrozas y las luces le gustó mucho. Y al día siguiente vinieron los Reyes. En casa solo tuvo un regalito, y luego en casa de los abuelos tuvo varios, pero fue éxito total. En casa un tambor y en casa de los abuelos un piano y una canasta para el baño. Y otra cosa no, pero está encantado con ellos. Aporrear y que suene música le gusta. Por ahora. Aunque levante dolor de cabeza a los padres. Y los padres estamos encantados cuando está feliz. Pero no con la comida..... ya podía comer bien, dormir bien, y seguir siendo un niño feliz. No se puede tener todo.